Apreciada Angela, como siempre gracias por tu buen consejo y visión objetiva de las cosas de la vida... a veces los árboles no nos dejan ver el bosque. Gracias de nuevo, hablar contigo serena el alma. Ya te convertiste en consejera oficial de mi alma. Un beso grande y afectuoso. (Sábado 7 Noviembre 2009, 06:04) |